La decisión ministerial conjunta n.º 2345.24, firmada por el Ministro de Juventud, Cultura y Comunicación y el Ministro Delegado de Presupuesto, ha desatado una ola de indignación entre los editores de prensa marroquíes. Esta decisión, que implementa el decreto gubernamental del 22 de diciembre de 2023 sobre el apoyo público a los sectores de prensa, edición, impresión y distribución, fue calificada por el Comité Ejecutivo de la Federación Marroquí de Editores de Prensa (FMEJ) como un “paso flagrante que consagra el monopolio y la exclusión.”
Una decisión controvertida
En una reunión celebrada el 5 de diciembre en Casablanca, el Comité Ejecutivo de la FMEJ expresó su profundo descontento con esta decisión. El comité la describió como “no objetiva y contraria a la ley,” señalando que contradice el espíritu del artículo 7 de la Ley de Prensa y Publicación, que exige transparencia, igualdad de oportunidades y neutralidad en la asignación de ayudas públicas a la prensa.
Exclusión de pequeñas y medianas empresas de medios
El Comité Ejecutivo destacó que esta decisión ignora los objetivos fundamentales del apoyo público, como el fomento de la lectura, la promoción del pluralismo mediático y el apoyo a los recursos humanos. En su lugar, introduce criterios como el volumen de negocios de las empresas mediáticas, lo que el comité considera un “precedente peligroso que amenaza el pluralismo mediático y pone en riesgo el futuro de cientos de pequeñas y medianas empresas de prensa.”
Distribución desigual de las ayudas públicas
El presupuesto para el apoyo público se ha duplicado hasta alcanzar los 3.000 millones de dírhams. Sin embargo, el Comité Ejecutivo denunció la asignación de 1.000 millones de dírhams a solo cuatro grandes instituciones mediáticas, mientras que el resto se distribuye entre un número limitado de empresas con un volumen de negocios entre 2 y 10 millones de dírhams. Según el comité, esta distribución excluye a las instituciones regionales y de pequeño tamaño, especialmente en las provincias del sur, condenándolas así a una “sentencia de muerte.”
Falta de consulta y exclusión deliberada
El Comité Ejecutivo criticó duramente la falta de una consulta real con los representantes de los editores. También denunció el uso de criterios “arbitrarios y no transparentes” por parte del Ministerio de Comunicación para clasificar las organizaciones profesionales, lo que llevó a la exclusión de la FMEJ, reconocida como la más representativa del sector.
Llamados a rectificar el rumbo
La federación pidió la anulación de la decisión ministerial conjunta y del decreto gubernamental relacionado, exigiendo la aplicación de las disposiciones del artículo 7 de la Ley de Prensa y Publicación. También propuso la formación de un frente nacional para defender los intereses del sector y anunció un programa de protestas a nivel nacional contra lo que calificó como un “plan destinado a excluir al 90 % del tejido empresarial profesional.”
El futuro del apoyo público en cuestión
Esta decisión plantea un amplio debate sobre el futuro del apoyo público a la prensa en Marruecos. La presión sobre el gobierno aumenta para que adopte leyes justas que tengan en cuenta los intereses de todas las empresas mediáticas, promoviendo los principios democráticos y el pluralismo mediático. Es fundamental abordar estos problemas para garantizar la continuidad de las instituciones mediáticas de todos los tamaños y su papel en el panorama mediático nacional.