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Después de varios años del cierre de las fronteras comerciales con las ciudades de Ceuta y Melilla, el debate sobre su posible reapertura vuelve a estar en el centro de atención. Esta cuestión plantea preguntas sobre quién se beneficiará más de esta decisión y cuál será su impacto en el comercio local, especialmente en un contexto donde algunos actores buscan rutas alternativas para evitar los aranceles aduaneros y las tasas portuarias marroquíes.
¿Quién se beneficiará más con la apertura de las fronteras?
Con la intensificación del debate sobre la reapertura de los pasos comerciales de Ceuta y Melilla, Marruecos se enfrenta a una decisión estratégica clave que definirá el futuro de su política económica y comercial. Por un lado, mantener las fronteras cerradas refuerza el papel del puerto de Tánger Med como un centro de comercio internacional, asegurando un control estricto sobre el flujo de mercancías conforme a la normativa aduanera marroquí. Esto protege la economía local de la competencia desleal y fortalece la posición de los productores y comerciantes marroquíes.
Por otro lado, reconsiderar la decisión y permitir el restablecimiento del comercio en estos pasos fronterizos podría impulsar la economía de las dos ciudades españolas y las regiones circundantes. Sin embargo, esto también podría abrir la puerta a la entrada de mercancías sin control fiscal, reduciendo los ingresos aduaneros de Marruecos y generando una competencia desleal en el mercado interno con productos que no estarían sujetos a los mismos aranceles que los importadores marroquíes.
Ceuta y Melilla no tienen industrias para justificar este flujo comercial
Estas dos ciudades carecen de fábricas o actividades industriales significativas que justifiquen el gran volumen de mercancías que transitaban hacia Marruecos. Desde un punto de vista económico, la lógica indica que las importaciones deben realizarse directamente a través del puerto de Tánger Med, en lugar de utilizar rutas no reguladas.
Un cambio hacia el comercio global en lugar del europeo
El cierre de las fronteras obligó a China a recurrir a puertos internacionales. Ya no puede utilizar Eurogate, un sistema que permite procedimientos acelerados dentro de la Unión Europea, lo que la ha forzado a depender de rutas comerciales internacionales que requieren más tiempo para los trámites aduaneros. Esto supone una gran pérdida económica para las empresas chinas, ya que cada día de retraso en la entrega de mercancías se traduce en costos adicionales.
Tánger Med: la alternativa legal y estructurada
Marruecos ha promovido el puerto de Tánger Med como una alternativa moderna y regulada para la importación de productos. Este puerto ofrece infraestructuras avanzadas y procedimientos aduaneros claros, garantizando un comercio alineado con las normativas internacionales y evitando así las prácticas de contrabando que anteriormente predominaban en los pasos fronterizos terrestres cerrados.
Una decisión estratégica para Marruecos
La reapertura de los pasos comerciales de Ceuta y Melilla podría beneficiar a ciertos actores, pero también podría representar una amenaza para la economía marroquí. Entre los principales beneficiarios están las empresas chinas, que podrían evitar los impuestos aduaneros y portuarios marroquíes utilizando el comercio informal para inundar el mercado con productos baratos sin pasar por los canales oficiales.
España también se beneficiaría al reactivar la actividad comercial en Ceuta y Melilla, ayudando a mitigar la crisis económica que han enfrentado estas ciudades tras el cierre de las fronteras.
Además, esta medida podría dar lugar al resurgimiento del comercio informal, del cual dependen miles de personas para subsistir. Esto podría afectar los esfuerzos de Marruecos por fortalecer un comercio estructurado y reducir la economía informal.
Sin embargo, el mayor perjudicado podría ser el propio Marruecos, ya que la competencia con productos de contrabando podría afectar a las industrias locales y a los comerciantes legales, reduciendo la inversión y frenando el desarrollo industrial, lo que debilitaría los esfuerzos del país por construir una economía basada en un comercio organizado y justo.
Alternativas para los excontrabandistas y dinamización de la zona de actividades económicas de Fnideq
Tras el cierre de los pasos fronterizos, miles de trabajadores del comercio informal se han visto enfrentados a grandes desafíos económicos, lo que hace indispensable la implementación de alternativas económicas reales y sostenibles para esta categoría. En este contexto, las autoridades marroquíes están trabajando en el desarrollo de la zona de actividades económicas de Fnideq, con el objetivo de convertirla en un polo comercial e industrial capaz de ofrecer oportunidades de empleo legales y estables, alejadas de la economía informal.
A pesar de los esfuerzos en marcha, es necesario adoptar soluciones innovadoras para aprovechar plenamente el potencial de esta zona, mediante la atracción de más inversores, la concesión de incentivos fiscales y la simplificación de los trámites administrativos, con el fin de crear un entorno comercial dinámico que impulse el crecimiento económico de la región. Además, el apoyo a las pequeñas y medianas empresas, junto con el desarrollo de programas de formación profesional adaptados, podrían representar una alternativa sostenible que permita a los excontrabandistas integrarse en la economía formal y garantizar una estabilidad socioeconómica duradera.